Saludos, Vicente. He visto en la entrevista la alusión hecha a lo que tú llamas "poesía de la normalidad", y su relación (directa) con la "poesía de la experiencia". Digamos que son dos términos para un mismo concepto. Dices que el maglior fabbro de la poesía de la experiencia es Felipe Benítez Reyes, que en él encuentras una singularidad dentro de esa corriente. Quiero hacerte una pregunta: ¿qué te parecen poetas como Carlos Marzal, Vicente Gallego, Luis García Montero o Eloy Sánchez Rosillo?
Esa pregunta está respondida en Singularidades (Bartleby, 2006) con más o menos precisión. Y allí explico también la relación entre los dos términos, que para nada son equivalentes, por cierto.
Gracias. Ya me habían entrado ganas de comprar "Singularidades" leyendo la entrevista. Me has "convencido", y espero que ese vocablo ("convencido") no dé a nadie lugar a malas interpretaciones. Lo leeré. "Digamos que son dos términos para un mismo concepto" es una generalidad ante el desconocimiento. Intentaré subsanarlo.
Interesante entrevista. "Los pangeicos pertenecen a un universo digital... no distinguen creación tradicional y creación on-line; la mayoría tienen blog o web, que alimenta a la narrativa luego publicada en libro." De acuerdo. Habría que ver si incluso hay un grupo que podría escribir en la red, con una estética, si la hay, del blog, pero cuya escritura en internet no es que alimente sus novelas, como dices de los pangeicos, sino que tiene el mundo digital como único fin. Podría ser incluso más rupturista que los otros, un grupo que no busca ser juzgado en la prensa escrita, ni ser trasladado a otro formato, porque nace, crece y muere en la red y cuyo público son sólo internautas. Que no tiene como meta la publicación tradicional, porque su escritura no necesita eso, ya no encaja ni siquiera en el formato del libro clásico. Quizá haya algo de eso creciendo por la red. O quizá no. Sólo era una divagación. De todos modos necesaria crítica la tuya. Te leemos y te seguimos. Un saludo.
Obviamente y por definición, si hay escritores pangeicos por excelencia son, desde luego, aquellos que no "salen" de la Red, y vuelcan en ella toda su escritura. Lo que ocurre, supongo que ya te lo imaginas, es un problema de discriminación, o mejor de elección: ¿cuánto hay que rastrear para saber dónde se encuentra la excelencia de los puramente digitales, para discernir quiénes valen la pena?
Supongo que, con el tiempo, se formarán agregaciones o grupos de escritura a través de páginas huésped, y esas páginas harán el papel que ahora hacen las editoriales. Habrá páginas-monstruo, como las grandes multinacionales editoras, dentro de las cuales habrá mucha basura y algún producto bueno; habrá páginas-Anagrama o páginas-Pre-Textos o páginas-Siruela (la Siruela de antes) que hagan selecciones interesantes, y habrá páginas-independientes o alternativas que harán el trabajo que defendemos desde este blog, el que están haciendo para la literatura tradicional editoriales como Elipsis, Libros del Asteroide, DVD, La Fábrica, Periféricas, Páginas de Espuma, Lengua de Trapo, Berenice, Eclipsados, o la dentro de poco naciente El Olivo Azul. Supongo que al principio será el Caos, como en todas las religiones arcaicas, pero luego irán apareciendo los credos, los diluvios universales y las buenaventuras. Saludos, Canibalibro.
Y como siempre la mayoría de la crítica española amalizará los textos con armas, que se han quedado viejas, que se encasquillan al disparar su crítica hacia estos nuevos lenguajes. Por eso los escritores pangeicos también necesitan de una crítica como la de "Diario de lecturas", que vive en la Red. Es interesante ver, cómo, por ejemplo, en el mundo del cómic, la mejor, y casi la única crítica razonada, está en Internet. Y en el cine, ocurre algo parecido. Es curioso lo que sucedió con una película como "Inland Empire", la última de Lynch. La mayoría de la crítica española la denostó, hablando de ella en unos terminos imposibles de analizarla, buscando el planteamiento nudo y desenlace habitual, hablando de una manera de sus secuencias que no encajaban para nada en las intenciiones de la película. ¿Cómo analizar una película así sin tener en cuenta el videoarte o cierto sentido de la abstracción cinematográfica, por poner sólo dos ejemplos? En cambio, la película, tuvo críticas mucho más interesantes en la Red, donde en algunos casos (No es que Internet sea el paraíso perdido, como tú indicas hay que buscar mucho en el Caos) se trabajaron con las referencias necesarias para analizarlar una película de esas características. Pero hay críticos, demasiados, que hacen crítica cinematográfica como si no hubiera exitido Godard. Y lo mismo sucede con la literatura. Bueno, que no me quiero extender más. Un saludo.
Os dejo aquí un enlace desde el entusiasmo que sentí con Inland Empire, y apoyando tanto a lo que dice Vicente (en lo de que hay que buscar, porque hay que hacerlo en la red, en este ejemplo, por ídem, para encontrar una crítica que no sea adversa (¿una crítica buena o que nos guste a los que nos ha gustado/entusiasmado la película? ;D), como a lo que dice Canibalibro; no conozco la obra de Vigalondo, pero esta crítica me ha hizo mucha gracia en su día y, en concreto, su colofón (último párrafo: una frase, ¡trece palabras!) me parece soberbio porque es la mejor crítica que se le puede hacer a los críticos del film.
Saludos, Vicente. He visto en la entrevista la alusión hecha a lo que tú llamas "poesía de la normalidad", y su relación (directa) con la "poesía de la experiencia". Digamos que son dos términos para un mismo concepto. Dices que el maglior fabbro de la poesía de la experiencia es Felipe Benítez Reyes, que en él encuentras una singularidad dentro de esa corriente. Quiero hacerte una pregunta: ¿qué te parecen poetas como Carlos Marzal, Vicente Gallego, Luis García Montero o Eloy Sánchez Rosillo?
ResponderEliminarEsa pregunta está respondida en Singularidades (Bartleby, 2006) con más o menos precisión. Y allí explico también la relación entre los dos términos, que para nada son equivalentes, por cierto.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias. Ya me habían entrado ganas de comprar "Singularidades" leyendo la entrevista. Me has "convencido", y espero que ese vocablo ("convencido") no dé a nadie lugar a malas interpretaciones. Lo leeré. "Digamos que son dos términos para un mismo concepto" es una generalidad ante el desconocimiento. Intentaré subsanarlo.
ResponderEliminarGracias, espero que el libro te sea de ayuda, aunque es demasiado personal y salvaje como para que te "convenza", me temo. Saludos.
ResponderEliminarInteresante entrevista. "Los pangeicos pertenecen a un universo digital... no distinguen creación tradicional y creación on-line; la mayoría tienen blog o web, que alimenta a la narrativa luego publicada en libro."
ResponderEliminarDe acuerdo.
Habría que ver si incluso hay un grupo que podría escribir en la red, con una estética, si la hay, del blog, pero cuya escritura en internet no es que alimente sus novelas, como dices de los pangeicos, sino que tiene el mundo digital como único fin. Podría ser incluso más rupturista que los otros, un grupo que no busca ser juzgado en la prensa escrita, ni ser trasladado a otro formato, porque nace, crece y muere en la red y cuyo público son sólo internautas. Que no tiene como meta la publicación tradicional, porque su escritura no necesita eso, ya no encaja ni siquiera en el formato del libro clásico.
Quizá haya algo de eso creciendo por la red. O quizá no. Sólo era una divagación. De todos modos necesaria crítica la tuya. Te leemos y te seguimos. Un saludo.
Obviamente y por definición, si hay escritores pangeicos por excelencia son, desde luego, aquellos que no "salen" de la Red, y vuelcan en ella toda su escritura. Lo que ocurre, supongo que ya te lo imaginas, es un problema de discriminación, o mejor de elección: ¿cuánto hay que rastrear para saber dónde se encuentra la excelencia de los puramente digitales, para discernir quiénes valen la pena?
ResponderEliminarSupongo que, con el tiempo, se formarán agregaciones o grupos de escritura a través de páginas huésped, y esas páginas harán el papel que ahora hacen las editoriales. Habrá páginas-monstruo, como las grandes multinacionales editoras, dentro de las cuales habrá mucha basura y algún producto bueno; habrá páginas-Anagrama o páginas-Pre-Textos o páginas-Siruela (la Siruela de antes) que hagan selecciones interesantes, y habrá páginas-independientes o alternativas que harán el trabajo que defendemos desde este blog, el que están haciendo para la literatura tradicional editoriales como Elipsis, Libros del Asteroide, DVD, La Fábrica, Periféricas, Páginas de Espuma, Lengua de Trapo, Berenice, Eclipsados, o la dentro de poco naciente El Olivo Azul. Supongo que al principio será el Caos, como en todas las religiones arcaicas, pero luego irán apareciendo los credos, los diluvios universales y las buenaventuras. Saludos, Canibalibro.
Y como siempre la mayoría de la crítica española amalizará los textos con armas, que se han quedado viejas, que se encasquillan al disparar su crítica hacia estos nuevos lenguajes. Por eso los escritores pangeicos también necesitan de una crítica como la de "Diario de lecturas", que vive en la Red. Es interesante ver, cómo, por ejemplo, en el mundo del cómic, la mejor, y casi la única crítica razonada, está en Internet. Y en el cine, ocurre algo parecido. Es curioso lo que sucedió con una película como "Inland Empire", la última de Lynch. La mayoría de la crítica española la denostó, hablando de ella en unos terminos imposibles de analizarla, buscando el planteamiento nudo y desenlace habitual, hablando de una manera de sus secuencias que no encajaban para nada en las intenciiones de la película. ¿Cómo analizar una película así sin tener en cuenta el videoarte o cierto sentido de la abstracción cinematográfica, por poner sólo dos ejemplos? En cambio, la película, tuvo críticas mucho más interesantes en la Red, donde en algunos casos (No es que Internet sea el paraíso perdido, como tú indicas hay que buscar mucho en el Caos) se trabajaron con las referencias necesarias para analizarlar una película de esas características. Pero hay críticos, demasiados, que hacen crítica cinematográfica como si no hubiera exitido Godard. Y lo mismo sucede con la literatura.
ResponderEliminarBueno, que no me quiero extender más.
Un saludo.
Os dejo aquí un enlace desde el entusiasmo que sentí con Inland Empire, y apoyando tanto a lo que dice Vicente (en lo de que hay que buscar, porque hay que hacerlo en la red, en este ejemplo, por ídem, para encontrar una crítica que no sea adversa (¿una crítica buena o que nos guste a los que nos ha gustado/entusiasmado la película? ;D), como a lo que dice Canibalibro; no conozco la obra de Vigalondo, pero esta crítica me ha hizo mucha gracia en su día y, en concreto, su colofón (último párrafo: una frase, ¡trece palabras!) me parece soberbio porque es la mejor crítica que se le puede hacer a los críticos del film.
ResponderEliminarhttp://blogs.elpais.com/nachovigalondo/2007/04/inland_empire_s.html
Un abrazo a todos (¡y viva "Amazing Gracie" Zabriskie, que edípico estoy!).
"Singularidades" me ha parecido purificador y desvelador (personalmente). Gracias por las vías que estás abriendo.
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